En un principio no iba a estar en casa para su cumpleaños, pero a último momento si estuvo allí y para hacer algo rápido me recordé de un individual con mapa mundi que tiene mi hijo de cuando era muy pequeño y lo ha guardado. Bueno entonces ese individual estuvo en el centro de la mesa; tengo algunas revistas viejitas con información turística de mi país y tomé algunas hojas y con ellas realicé unos avioncitos y compré unas hojas con mapa mundi para colorear, esto pensando que al finalizar el almuerzo nos serviría para hacer algunas actividades. Con esas actividades aprendimos muchas cosas de otros países con la experiencia de viajes de la familia que compartimos esa celebración. (También tenía a mano una caja de crayones)
Increíble que siendo personas adultas, con un mapa para colorear tuvimos un buen tiempo de compartir y aprender.
Fue una decoración bien sencilla, pero bonita. Les dejo algunas fotos.
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